Como parte de la celebración del Mes de la Herencia Hispana de Estados Unidos, Google celebra la vida y el legado del músico estadounidense de raíces puertorriqueñas (“neuyorican”) y artista de renombre internacional, Tito Puente. El vídeo Doodle animado está ilustrado por el artista puertorriqueño radicado en Nueva York, Carlos Aponte.

Puente, artista polifacético, fue percusionista, compositor, autor de canciones, artista de grabación y director de orquesta. Con una carrera de más de cinco décadas, se le suele llamar “El Rey de los Timbales” y “El Rey de la música latina”. En este día de 2021, se inauguró el monumento a Tito Puente en East Harlem, Nueva York.

Puente nació el 20 de abril de 1923 en el Harlem Hospital Center, en el Spanish Harlem de Nueva York. Creció rodeado de música puertorriqueña, cubana y de grandes bandas, y mostró un importante talento musical desde una edad temprana. Comenzó su carrera como baterista en su adolescencia y encontró su gran oportunidad tocando para los Happy Boys de Federico Pagani y la Orquesta de Machito. Sirvió en la Marina durante la Segunda Guerra Mundial, tocando el saxofón alto como director de la banda del barco, además de otros diez instrumentos. Tras la guerra, continuó sus estudios en la Juilliard School of Music.

En 1948 fundó su propia banda, la Orquesta de Tito Puente, y rápidamente se ganó la reputación de que sus actuaciones animaban al público a bailar. Puente era conocido por su asombrosa habilidad con los timbales, así como por su forma de combinar la instrumentación de las grandes bandas y las armonías de jazz con la música afrocubana. Grabó más de 118 álbumes y está acreditado en docenas más, más que cualquier otro director de banda de timbales hasta la fecha. Este viaje comenzó con Ran Kan Kan, su primera grabación profesional y la banda sonora del actual Doodle.

Más allá del movimiento del mambo, Puente experimentó con otros géneros de la música latina, como el boogaloo, la pachanga y, finalmente, la salsa. Fue considerado un pionero musical por su creatividad y experimentación, y se le atribuye el mérito de haber popularizado la música latina en Estados Unidos. En 1969 se le concedió la llave de la ciudad de Nueva York.

Además de los méritos musicales que recibió a lo largo de su carrera, Puente también se dedicó profundamente a crear oportunidades para la comunidad latina. En 1979, creó un fondo de becas que apoyó a jóvenes y prometedores percusionistas latinos durante más de 20 años.

El éxito, la presencia y la musicalidad de Puente son ampliamente conocidos y respetados hasta el día de hoy.  Recibió un reconocimiento póstumo en la primera edición de los premios Grammy Latinos, y la calle de Harlem en la que creció, E. 110th Street, pasó a llamarse Tito Puente Way en honor a su vida y su legado.

En 1990, logró tener una estrella en el Paseo de la fama de Hollywood. El emblemático músico murió de un infarto agudo de miocardio en el corazón a los 77 años de su vida.